Inflación y tipos de interés en la zona euro
Recientemente la presidenta del Banco Central Europeo (BCE), Christine Lagarde, comentó que continuará con las subidas de tipos de interés en la zona euro. Y confirmaba que no habrá bajadas de tipos de interés hasta el año 2025.
La entidad tiene como una de sus prioridades controlar la inflación, y por eso descarta cualquier bajada del precio del dinero hasta que la inflación se haya estabilizado entorno al 2%, nivel que el propio BCE ha estimado no sucederá hasta el año 2025.
De este anuncio y de la reciente subida de 25 puntos básicos llevada a cabo la pasada semana, la conclusión que podemos extraer es que parece confirmarse que aunque el BCE ha expresado que es probable que se produzca una pausa en la subida de tipos, no podemos descartar que se siga con esta tendencia durante los próximos meses.
En la actualidad después de la subida de estos 25 puntos básicos el tipo de interés oficial del dinero se sitúa en el 4,25%, el nivel más elevado desde octubre de 2008.
Aunque el BCE manifiesta que hay mejoras en las expectativas de inflación, parece que no han sido suficientes para haber detenido esta última subida de tipos de interés. Además, la propia Lagarde comentó hace unas semanas que «Los tipos de interés no volverán donde estaban hace unos años», y ha insistido que las proyecciones macroeconómicas de la institución apuntan a que la inflación de la eurozona retornará al objetivo de estabilidad del 2% «en 2025».
Por ello sólo piensan reducir los tipos de interés una vez se alcance este objetivo del 2%, ya que no quieren bajar los tipos para luego tener que volver a subirlos para contener la inflación en caso de que ésta no se encuentre bajo control.
Aun así, hay ya un importante número de expertos que opinan que el BCE puede que haya entrado en la fase final de este cúmulo de subidas, 9 consecutivas hasta hoy. Sobre todo, teniendo en cuenta que la propia Lagarde manifestó por primera vez la posibilidad de hacer una pausa en la próxima reunión, que se celebrará en septiembre.
Inflación
Según los últimos datos del mes de junio publicados recientemente la tasa de inflación interanual en la eurozona se situó en el 5,5%, frente al 6,1% del mes de mayo. Este 5,5% es justo el mismo nivel de enero de 2022.
Mientras la tasa subyacente en la eurozona, sin alimentos no elaborados ni productos energéticos, ascendió hasta el 5,4%% su nivel máximo.
En el mes de julio los datos adelantados de Eurostat apuntan a que se situó en el 5,3%, lo que supone el menor encarecimiento de los precios desde enero de 2022, y la tasa subyacente en en el 5,5%.
El dato de inflación de junio supone cuatro meses consecutivos de desaceleración y alcanza su nivel más bajo desde mayo de 2022.
Las causas de este menor incremento en la inflación se pueden atribuir en parte a la caída del 5,6% en el coste de la energía, frente a la bajada del 1,8% en mayo.
No ha sido así con los alimentos frescos en los que se ha producido un encarecimiento del 9%, seis décimas por debajo del mes anterior.
Por su parte en los servicios los precios subieron un 5,4% en tasa interanual, cuatro décimas más que en mayo, y los bienes industriales no energéticos subieron un 5,5%, tres décimas menos que el mes anterior.
Si excluimos la energía, la tasa interanual de inflación quedó en el 6,9%, frente al 7% del mes anterior. Si eliminamos el impacto del precio de los alimentos, el alcohol y el tabaco, la tasa subyacente de inflación alcanza el 5,4% aumentando levemente con respecto al mes de mayo cuando se situó en el 5,3%.
Inflación en España
En España según el indicador adelantado del mes de julio se ha producido un repunte en el IPC (índice de precios al consumo) del 0,1% en julio con respecto al mes de junio, en tasa interanual alcanzó el 2,3%, debido en gran medida a la subida de los precios en los carburantes y de los paquetes turísticos ligados al verano.
Pero pese a esta subida del IPC, España se mantiene con una de las tasas inflacionarias más bajas de toda la Unión Europea. Únicamente Luxemburgo tiene un índice inferior.
Estos datos aún no son definitivos. Y tendremos que esperar hasta el día 11 de agosto para corroborarlos.
¿Cómo nos sigue afectando esta alza en los tipos de interés y una inflación alta?
Según las estimaciones del BCE durante los próximos meses la inflación debería empezar a caer ya que se observa cierta moderación en los precios de la energía en el medio y largo plazo. Aunque según la propia Lagarde todavía llevará un tiempo reducir la inflación.
Queda claro que de momento la inflación y las alzas de tipos de interés ya están afectando a un gran número de familias, y la situación ha ido agravándose. Parece que en el corto plazo lo seguirá haciendo, por ello muchas familias no tienen más opción que reducir el consumo e intentar ahorrar.
Este aumento en los precios de los bienes y servicios ya provoca que las familias puedan comprar menos con la misma cantidad de dinero. Han de destinar más dinero a la misma cesta de la compra, reduciendo su capacidad para pagar otras facturas, como el alquiler, la hipoteca, el préstamo del vehículo, etc.
Además, como la tasa subyacente sigue en niveles altos, las facturas en elementos de primera necesidad siguen al alza para las familias, teniendo que destinar más dinero al pago de estas.
La inflación también afecta a los ahorros y las inversiones de las familias. Si la inflación aumenta y el valor del dinero disminuye, los ahorros y las inversiones valen menos.